Padre Celestial, Vengo a Ti con un corazón humilde, elevando a mi madre en oración. Te pido que la bendigas con buena salud, un cuerpo fuerte y una mente en paz. Que su vida esté llena de vitalidad, resiliencia y alegría, para que pueda seguir prosperando y experimentando cada día como un regalo Tuyo. Señor, por favor rodéala de Tus ángeles. Haz que sienta su presencia, su amor y su tierna guía. Ayúdala a reconocer que siempre está protegida, vigilada por Tus mensajeros celestiales, que traen paz, consuelo y seguridad. Que se sienta segura y querida, sabiendo que Tu amor y tu protección divina están con ella. Padre, ábrele los ojos a la abundancia que la rodea. Recuérdale las bendiciones que ha recibido y ayúdala a disfrutarlas. Que se sienta capacitada para vivir plenamente, abrazando todas las oportunidades y recursos que siempre le brindas. Guíala para que prospere, no solo en cuerpo sino en espíritu y corazón, mientras continúa creciendo en la riqueza de Tu amor y gracia. Gracias, Señor, por el precioso regalo de mi madre. Que ella viva una larga vida llena de amor, fortaleza, felicidad y alegría. Que sus días sean bendecidos con paz y que ella siempre sienta el calor de tu presencia y el apoyo de tus ángeles. En tu santo nombre, el que vive en la fe, ora. Amén.